Todo sobre la caducidad de los cosméticos (sí, existe)

Que levante la mano quien no tenga un armario, caja, estantería o rincón de su casa dedicada a decenas de cremas, maquillajes y potingues que jamás a utilizado (ni probablemente utilizará), pero que, sin embargo, guarda para “ocasiones especiales”. Inclúyase dentro de este grupo de cosméticos mascarillas, iluminadores, exfoliantes, tratamientos específicos de cuello, ojos o cualquier otra parte del rostro, por no hablar de paletas de sombras en tonos fosforitos o labiales ‘vamp’ (que compramos en cantidades industriales en 2014 y que nunca llegamos a utilizar). No los tiramos a la basura porque son productos que cuestan mucho dinero y tenemos la esperanza de necesitarlos algún día. Pero, ¿y si todos esos cosméticos estuviesen caducados? Resulta que, al igual que ocurre con la comida, los productos de belleza también caducan (unos con más facilidad que otros) y la conservación de los mismos es crucial para alargar su vida. Además, es importante saber el estado en el que se encuentran nuestras cremas y maquillajes, ya que aplicar productos caducados podría ser muy perjudicial para nuestra piel. Para resolver todas las dudas al respecto hemos contactado con una experta en materia, la dermatóloga Adriana Juanes, del Instituto Médico Láser, nos resuelve el cuándo, cómo y por qué de la caducidad de los cosméticos, y nos desvela algunos trucos para alargar su vida lo máximo posible.

¿A qué nos referimos cuando hablamos de caducidad de cosméticos?

Al igual que ocurre con la comida, la mayoría de los cosméticos son perecederos, es decir, caducan o pierden gran parte de sus propiedades con el tiempo. Si bien es cierto que no pueden provocarnos una intoxicación estomacal ni afectar gravemente a nuestro organismo, aplicar cosméticos caducados puede tener consecuencias negativas en nuestra piel. Tal y como explica la doctora Juanes, “hay ciertos cosméticos que pueden caducar o perder propiedades si pasa demasiado tiempo y, sin duda, esto puede afectar a nuestra piel. En el mejor de los casos, estos productos no cumplirían perderían efectividad en sus objetivos (ant-edad, combatir el acné, hidratación, tonificación…) y, en ocasiones, pueden provocar irritación cutánea, así como erupciones, si ha pasado demasiado tiempo o su conservación no ha sido la adecuada”.

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Por supuesto, cabe destacar que no todos los cosméticos son iguales y, por tanto, la longevidad de cada uno de ellos depende de varios factores. “La vida de cada cosmético varía según los principios activos y los excipientes que lo conforman, y depende también de la capacidad oxidativa, la temperatura y las condiciones ambientales en las que se conservan”, aclara la dermatóloga, especialista del Instituto Médico Láser. Por ejemplo, una crema hidratante o sérum suele tener unos 30 meses de margen, siempre y cuando no haya estado mucho tiempo en contacto con el exterior; las barras de labios pueden durar hasta tres años, ya que se conservan bien en diferentes ambientes, aunque pueden ser un nido de baterías si se comparten con otras personas o si has tenido alguna infección; y las máscaras de pestañas no suelen durar más de un mes o dos porque, igual que ocurre con las lacas de uñas, tienden a secarse y pierden textura.

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— Shauna Wed Mar 24 16:47:00 +0000 2021

¿Cómo podemos saber cuándo caducan nuestros productos?

Aunque la mayoría de los mortales no nos fijemos en ese tipo de detalles, la mayoría de los cosméticos suelen incluir la fecha de caducidad en sus envases; se trata de un icono de un tarro abierto que incluye una cifra, referente al tiempo que tarda en caducar el producto una vez se ha abierto. Sin embargo, al igual que ocurre con los alimentos, en muchos casos esa fecha no es del todo fiable. Tal y como explica la doctora Adriana Juanes, “al margen de la fecha de caducidad que figure en el envase, en general las cremas duran en torno a seis meses aproximadamente y los productos de maquillaje más tiempo, un año o más, debido a que no están compuestos por productos activos tan delicados y el formato de envase es más seguro”.

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Por otro lado, independientemente de la fecha que marque el envase, nosotras mismas podemos detectar si nuestros cosméticos están en buen estado o si, por su aspecto, deberíamos deshacernos de ellos. “Pequeños detalles como el olor o los cambios de color del producto cosmético pueden alertarnos de la caducidad del mismo, así como los cambios en la textura”, añade la dermatóloga.

¿Qué podemos hacer para alargar la vida de nuestros cosméticos?

Tal y como hemos explicado al inicio de este artículo, el cuidado y la conservación de nuestros productos puede influir en la vida de los mismos. Al fin y al cabo, el orden y la buena manutención, así como la revisión de los productos de forma habitual hará que estos se conserven en buen estado durante más tiempo. “Debemos conservarlos en una temperatura ambiente (más bien fresca, aunque no extrema), asegurarnos del correcto cierre de cada producto y ser obedientes ante las instrucciones de conservación que indican en los envases. Incluso, existen cosméticos que incluyen envases de seguridad”, asegura la doctora Juanes.

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Por último, cabe destacar que una vez el producto comienza a deteriorarse, no todo está perdido. Dependiendo del producto del que se trate, podemos darle una segunda vida, siempre y cuando no haya caducado del todo. Adriana Juanes, del Instituto Médico Láser, nos recomienda, “hay maquillajes o cosméticos que pueden salvarse al emusionarlos con crema hidratante o emoliente, aunque cuando producto ha perdido propiedades y está caducado es difícil recuperarlo”.

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