¿Es bueno o malo exfoliarse los labios?

Quien se posiciona a favor de realizar un 'peeling' periódico a los labios, argumenta que la retirada de células muertas siempre supone ayudar a una regeneración celular eficaz, al permitir que la piel quede más permeable y lista para absorber los productos que pones a continuación. Sin embargo, puede que la composición de los labios, que son una semi-mucosa, haga de este asunto la excepción. A la hora de exfoliar (o, al menos de elegir cómo y con qué exfoliar) no es lo mismo la piel que la mucosa.

LO BUENO DE EXFOLIAR LOS LABIOS

Para empezar, es cierto que con bastante frecuencia la zona de los labios y su contorno se queda muy seca, llena de pielecitas. Si bien a una piel seca le podría convenir cierto pelado, no así ocurre si a ese estado de sequedad se le suma irritación (por ejemplo, cuando tienes los labios 'cortados'). Una piel irritada jamás debe ser sometida a una agresión. Es decir, que si quieres exfoliarte los labios porque te quedan más suaves y bonitos y te parece que el labial queda hasta mejor y se fija más tiempo, adelante. Pero hazlo un día que estén bien, sin irritar, y hazlo con mucho mimo, sin frotar excesivamente y sin emplearte a fondo como si quisieras quitar la comida quemada en la cacerola.

EXFOLIARSE LOS LABIOS... ¿A MENUDO?

No, por favor. Hazlo con una frecuencia máxima semanal. Siempre mejor por la noche para que los labios no tengan que exponerse a ningún daño y asegurándote que siempre, siempre, pones hidratación justo después. Con ‘hidratación’ nos referimos a un bálsamo de labios nutritivo, mejor sin perfume ni color.

PROBLEMAS QUE SURGEN AL EXFOLIAR LOS LABIOS

¡Atención! Esto es importante: si tienes herpes labial de forma recurrente, ni se te ocurra exfoliar los labios porque ten por seguro que la calentura reaparecerá ese mismo día o al siguiente. Además de esta precaución, los dermatólogos recomiendan tomar otras:

1. Si te exfolias los labios con demasiada fuerza o demasiada frecuencia, es más que probable que dañes la delicada mucosa del labio, provoques cierta abrasión, micro-lesiones e, incluso, sangrado. Mucho ojo.

2. Elige un exfoliante muy suave, de grano fino. No te hagas 'peelings' caseros con azúcar, ni sal, ni limón ni, por supuesto, con las cerdas gastadas de un cepillo de dientes, como recomiendan muchas ‘tiktokers’. Compra siempre un producto específico y úsalo con mesura y mimo.

3. Un exceso de exfoliación en los labios puede provocar híper-pigmentación en la zona de alrededor de la boca. O, sea, manchas.

Si estás dispuesta a exfoliar tus labios con cuidado y un buen producto, aquí tienes una selección que hemos hecho para ti: