La falsa médica de A Coruña ya había ejercido en una residencia de mayores de Lugo

La Voz de Galicia

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Imagen de la residencia de Outeiro de Rey ALBERTO LÓPEZ

La Guardia Civil la arrestó en febrero del 2020 por intrusismo laboral, falsedad documental y por un delito contra la salud pública

28 ene 2022 . Actualizado a las 16:10 h.WhatsappMailFacebookTwitterComentar ·

Suma y sigue en el caso de la falsa médica detenida el pasado lunes en A Coruña por ejercer en una mutua sin tener la titulación ni haber estudiado nunca medicina. Si el martes se supo que ya a finales del 2019 había sido denunciada por el Colegio de Médicos de A Coruña por hacerse pasar por especialista del Chuac, utilizar cuños falsos del Hospital A Coruña, trabajar como doctora para la Cruz Roja y falsificar recetas, ahora se confirma que poco después fue detenida por llegar a estar empleada como doctora en una residencia de ancianos de Outeiro de Rei.

«Sí, sí, es la misma mujer», confirmaron este viernes fuentes próximas al proceso abierto por el colectivo médico contra la estafadora.

Las andanzas de la suplantadora en la provincia lucense fueron objeto de una operación especial de la Guardia Civil, denominada Domus, que le siguió la pista desde noviembre del 2019 hasta febrero del 2020, cuando fue finalmente arrestada y puesta a disposición judicial por intrusismo laboral, falsificación de certificados oficiales, falsedad documental y por un delito contra la salud pública.

La detención de la mujer, que entonces tenía 26 años, se realizó a raíz de una denuncia presentada por el Colegio de Médicos de Lugo, donde con sus artimañas llegó a obtener un número de colegiación durante un tiempo. A principios de octubre del 2019 había comenzado a trabajar en el geriátrico lucense, pendiente de entregar la documentación acreditativa de su titulación. El 17 de octubre, acudió al colegio lucensepara solicitar su número de colegiado (requisito obligatorio para ejercer) con un certificado de estudios con el listado de las asignaturas cursadas en la Universidad de Santiago y la solicitud del título, ya que supuestamente acababa de terminar la carrera y todavía no lo tenía en su poder. Pidió además un talonario de recetas privadas y otro de estupefacientes que recogió apenas quince días después, el 30 de octubre. Sin embargo, al día siguiente, una denuncia en el Colegio alertó de que la joven había trabajado en años anteriores en Ferrol pero como técnico de farmacia, no como médico, profesión de la que presumía en las redes sociales.Al parecer, la mujer, natural de la provincia de A Coruña, había cursado un ciclo de FP.

Ante la sospecha, la entidad profesional se puso en contacto con la universidad compostelana, que el 5 de noviembre confirmó que nunca había estado matriculada en la USC, de modo que tanto la certificación de asignaturas cursadas como la documentación solicitando el título de grado en medicina y cirugía que había presentado eran falsas.

El propio Colegio de Médicos de Lugo trasladó a la residencia de ancianos de Outeiro Rei, donde trabajó durante aproximadamente un mes, la información sobre el fraude de la falsa médica y en una reunión urgente de la junta directiva decidió anular la colegiación y presentar denuncia. Además, le reclamó la devolución de los talonarios de recetas. «Los entregó y por fortuna no había gastado ninguna», aseguran miembros entonces de la entidad. La institución planteóuna querella por esta causa y, según apuntan las mismas fuentes, todavía está pendiente de que se señale fecha para el juicio.

La investigación de la Guardia Civil culminó con su arresto tres meses después, en febrero del 2020.Pero en ese trimestre no dejó tampoco su simulación ni tampoco de realizar otras labores como doctora, al parecer incluso fuera de Galicia.

El 19 de diciembre del 2019 fue el Colegio de Médicos de A Coruña el que la denunció ante la policía al tener conocimiento por una paciente de que le había recetado fármacos con un cuño falso del Chuac, además de haber llevado a cabo antes otras acciones sanitarias para las que no contaba con titulación e incluso publicitarse en las redes sociales como médica del complejo hospitalario coruñés. En este caso, la vista oral por intrusismo y falsificación está fijada ya para el mes que viene en A Coruña, y tanto el fiscal como la acusación particular, ejercida por el colegio coruñés, solicitan una pena de cuatro años de cárcel.

Colegiarse con documentos falsos: una tarea muy difícil

jorge casanova

Ahora, a su historial se suma la última detención del pasado 24 de enero también en A Coruña, cuando la misma mujer fue de nuevo arrestada haciéndose pasar por médica en una mutua de la ciudad.

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